PAPELÓN GARCÍA

Padre, perdónalo porque ya no sabe lo que hace, parece decir una resignada Pilar Nores.















Sus metidas de pata ya se están haciendo frecuentes y vamos acostumbrándonos a ellas, pero con esta última del aumento de sueldos a sus ministros podemos decir que nuestro querido Pre-
sidente (querido por los caricaturistas) ha mejorado su técnica.

En primer lugar echando a perder lo que había ganado en las encuestas con su Bailetón, enemistándose nuevamente con la población. En segundo lugar, enfrentándose con el Congreso, con el Alcalde de Lima y hasta con Alejandro Toledo, lanzando prácticamente la candidatura presidencial de estos dos perso-
najes. Finalmente, después de su torpe faenón, se arrepiente
y decide ya no aumentarle el sueldo a sus ministros, dejando
la impresión de que ha perdido la brújula.

¿Acaso tendrán razón aquellos que dicen que el Presidente
Alan García sólo está calificado para bailar?





















Papelón, dice el Director de Perú 21 Fritz Du Bois. Tremenda chambonada, dice el ex Director de Perú 21 Augusto Alvarez Rodrich. Alan ha logrado que el antiguo y el nuevo Perú 21 estemos más unidos que nunca. Gracias señor presidente.

ENLACES:
El Gobierno retrocede - Perú 21
Bailando por un sueldo - Augusto Álvarez Rodrich
Gobierno Veleta - Juan Sheput
No aprende a gobernar - Juan Sheput
"Sacrificio" ministerial - Menoscanas

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Y Yehude queda como ministro angurriento, ya lo quemó... todo un faenón.

LUIS

verdemundo dijo...

Te vas a suavizar con Perú21 ahora? yo todavía ando medio resentido.

Anónimo dijo...

Parece que esta tratando de buscar cualquier motivo para decir que Peru 21 ahora esta chavere.

Papelon aca, creo.

Ramon

HEDUARDO dijo...

No te molestes Anónimo. Con el jale de Batman, Perú 21 se pondrá más chevere.
Los dibujantes políticos no podemos suavizarnos nunca, Verdemundo, porque perderíamos nuestra razón de ser.

verdemundo dijo...

Que bien Heduardo!! con lija para fierro!!

Pregunta: existe algún libro con tu biografía y la recopilación de tu trabajo?

Aquiles Martin dijo...

Aquí en este blog, más abajo hay un baúl bien chévere.
no pes verdemundo, los libros ya jueron ;)

Anónimo dijo...

El mitómano Zelig y la Chichi II ( Part One)

Quienes pensaron que Augusto Alvarez Rodrich se iba a quedar de brazos cruzados con el golpe bajo que le lanzó su “amigo” y “colega” de muchos años, Mirko Lauer, cuando en una reunión del IPYS lo llamó “reducidor” por comprar robos (así llamó Lauer a los petroaudios) y además, publicar la noticia en Perú 21, se equivocaron.

Este domingo ‘Kid’ Augusto Dinamita salió medio liviano y de entrada le dio un quiñe en la jeta al ‘neutro’ editorialista.

El nuevo columnista de La República llamó a la estrella del diario, Mirko Lauer, “doctora Eudora Fletcher”..!

¿Y quién rayos es la doctora Eudora Fletcher..?

Se trata de una historia política/cómica fascinante de los años 20’s norteamericanos que trataré de resumir:

Eudora Fletcher, una psicoanalista, persistente, ambiciosa que por circunstancias del azar analiza el estado mental de un famoso personaje político cuando éste es admitido en su hospital Tertulias...

El interés que se despierta en la “doctora” no sólo obedece a su vocación profesional, sino también buscando su propio enriquecimiento.

A través del hipnotismo la doctora (Mirko Lauer) descubre en el personaje un extremo caso de inseguridad que lo lleva cotidianamente a camuflarse entre las personas, adaptando distintas apariencias para ser aceptado.

La doctora Fletcher en el proceso advierte que el personaje, “Leonard Zelig”, por temporadas desarrolla una personalidad intolerante con opiniones discrepantes.

En sus estudios, la doctora descubre que el personaje, (Alan García) cambia su apariencia física depende con quien esté compartiendo.

Cuando se reúne con gente “importante”, se desvive en alabanzas refinadas con acento snobbista a las clases pudientes, se peina y sonríe más a menudo; mientras en la cocina, campechano con la servidumbre, carajea, hierve de ira insultando la codicia de los ricos y lo hace con grueso lenguaje proletario.

Si el personaje se mezcla con judíos le crecen las barbas, si está con negros su piel y hasta su tono de voz cambian.

En un bar irlandés, por ejemplo, sus cabellos se tornan rojo y desarrolla el mismo acento (dejo) de los contertulios. Puede aparecerse a una reunión como negro, indio cobrizo, o hablando chino, igual si está rodeado de gordos se vuelve rechoncho

La palabra “zelig” fue tomada del idioma Alemán que significa “bendecido”..!

El título original de la película se llamó El Pijama del Gato.

La historia de Leonard Zelig, el personaje central de la obra, se desarrolla a finales de la década de 1920 cuando este extraño hombre empieza a llamar la atención pública debido a sus repetidas apariciones en diferentes lugares con diferentes aspectos, variando de opinión a cada paso; tiene la capacidad sobrenatural de cambiar su apariencia adaptándose al medio en el que se desenvuelve, fue conocido como el hombre camaleón.

Zelig (1983) es en realidad una comedia (película)de Woody Allen, que encaja como anillo al dedo en la trama de este domingo que Augusto Alvarez Rodrich desarrolla a la perfección.

La doctora Eudora Fletcher, una tarde de verano, después de leer una cantidad impresionante de escritos suyos defendiendo al personaje, se da cuenta que se ha enamorado de Leonard Zelig. A partir de este "descubri iento", la defensa a capa y espada se hace máscpatética: Así el doctor García esté notoriamente equivocado, Mirko Lauer recurre a su circunvante sintaxis para decir lo contrario.

Debido a la cobertura que los medios de comunicación le dan al caso, paciente y doctora, devinieron en parte de la cultura popular de aquellos tiempos.

Sin embargo, la fama que ambos con desmesura buscaron, fue la causa principal de su separación. La misma sociedad que hizo de Leonard Zelig un héroe y lo llevó muy joven a Palacio de gobierno, finalmente lo destruye. Después enfermo el manganzón desaparece.

Mirko Lauer luego de muchos esfuerzos, lo encuentra en Alemania trabajando con los Nazis justo antes que estalle la Segunda Guerra Mundial. Juntos escapan y regresan a los EEUU donde son proclamados héroes gracias a la habilidad de Alan García de huevear una vez más: Miente sobre las extraordinarias facultades de la doctora Chichi Fletcher II piloteando todo el Atlántico con el avión volteado patas para arriba porque el tanque de gasolina estaba agujereado..!

Algunos aspectos cómicos de la historia:

The Ku Klux Klan, conoció a Leonard Zelig como un sucio judío que podía convertirse en chino o en indio cobrizo, según conveniencia, por eso lo vio como una triple amenaza.

Pareciera que algún allegado a Mirko Lauer del diario La República, le “sopló” a Augusto Alvarez Rodrich sobre el artículo que la “doctora” publicaría este domingo.

Porque Alvarez Rodrich coge a la Chichi II en el pleno vuelo, es decir, en el aire:

“Los que hacen críticas o denuncias al gobierno”, para la doctora Fletcher (Mirko Lauer), -dice Alvarez Rodrich- “son gente perversa que está en contra del progreso o, en el mejor de los casos, tontos útiles de candidaturas extremistas en el 2011″. (LR 4/1/09)Nuestro Zelig y su concepto de gobernabilidad: AAR.

La discrepancia del alcalde metropolitano, Luis Castañeda Lossio por la intromisión del doctor García en asuntos municipales de la Costa Verde, para la doctora Eudora Fletcher “obedece a cálculos políticos, y no soporta un análisis serio”. (ML/LR 4/1/09)

E insiste Mirko Lauer: “Lo cual parece confirmado por la precipitada oportunidad del anuncio de Castañeda, la inversión tirada al tacho, el desplante al presidente Garcia y la ausencia de debate público en una prensa magalizada”" ML.
(LR 4/1/09)

NOTA.- Tomado de:


http://pepitas.com.pe/prensa/alvarez-rodrich-reaparece-en-la-republica/#comments

HEDUARDO dijo...

Verdemundo, mi vecina está escribiendo mi biografía. Por eso estoy tratando de hacer méritos con ella.

Aquiles Martin dijo...

waaaaa, yo pensaba que zelig era solo una película de woody allen.

heduardo, si necesitan corrección ortográfica, no dudes de mí. Sería un honor. Sería un honor.